(VIDEO) Lo corta su novia y decide abrir fuego contra los asistentes de una fiesta
SAN DIEGO — Un hombre perturbado por una ruptura amorosa se sentó tranquilamente en una silla mientras disparaba contra los asistentes a una fiesta de cumpleaños, y telefoneó a su exnovia para que ella pudiera escuchar los disparos y gritos de terror, dijo el lunes la policía de San Diego.
Antes de que la policía lo abatiera, Peter Selis mató a una mujer e hirió a seis personas en un ataque a tiros que convirtió una fiesta de cumpleaños en un pandemonio. Mientras los disparos resonaban entre las torres de apartamentos, muchas personas corrían por sus vidas y los heridos quedaban tendidos desangrándose al lado de la piscina.
Todas las víctimas, salvo una, eran negras e hispanas, mientras que Selis era blanco, pero la policía no cree que la raza haya sido factor en los hechos.
“Estas víctimas simplemente estuvieron cerca del hombre cuando cometió esta terrible tragedia”, señaló la jefa de la policía, Shelley Zimmerman. “Lo que comenzó como una celebración de la fiesta de cumpleaños de un amigo se convirtió en una tragedia de grandes proporciones para todos los asistentes”.
Selis, de 49 años, estaba deprimido por su reciente rompimiento amoroso, aunque la familia y amigos a los que entrevistó la policía dijeron que no habían advertido algún indicio de que estuviera tramando algo siniestro.
Mientras los niños chapoteaban en la piscina, una familia disfrutaba de una bañera caliente y otras personas comían papas fritas y hot dogs. El hombre sobresalía entre la multitud de unas 35 personas; llevaba puesta una chaqueta negra gruesa aunque hacía calor y se sentó a la entrada de la piscina, dijo Demetrius Griffin, uno de los invitados a la fiesta.
Selis comenzó su ataque a tiros después de que se le acercara el hombre que celebraba su 50mo cumpleaños. Griffin supuso que su amigo, el cumpleañero, que era siempre cordial con todos, había invitado al hombre para que se divirtiera.
Sin embargo, el atacante sacó su pistola, baleó al anfitrión en dos ocasiones por la espalda y disparó después contra los demás, señaló Griffin.
“Todo fue muy espeluznante por decir lo menos”, afirmó Griffin. “Él se quedó sentado. No decía nada. Solamente abrió fuego”.
Después de que baleara a dos personas, Selis, que vivía en el complejo, llamó a su exnovia para decirle lo que había hecho.
“Selis se quedó en el teléfono hablando con su ex novia mientras seguía disparando”, dijo Zimmerman. “Es evidente que Selis quería que su ex novia escuchara mientras realizaba su ataque”.