Cuando no vale la pena quejarse

En alguna ocasión tuve la oportunidad de trabajar con una señora que reiteradamente manifestaba su queja ante el fuerte calor en un verano de tantos en Ciudad Obregón, me resultaba curioso porque a pesar de llegar en un carro último modelo con las ventanas arriba y con al parecer buen aire acondicionado, solo con bajar de su carro y llegar […]

Continuar leyendo »