Nogales, Sonora, septiembre 5 de 2019.- Amistad y confianza, dos valores humanos que recibió Jassiel “N.” cuando más lo necesitaba, pero que traicionó de la peor manera a la persona que le ayudó en un momento difícil.

El joven, de 25 años, privó de la libertad y violó en tres ocasiones a quien le tendió la mano, delitos que pagará con 35 años de prisión al aceptar el procedimiento abreviado.

A inicios de noviembre de 2018, el individuo arribó a Nogales procedente del Sur de Sonora en busca de una mejor vida, encontró trabajo de cajero en un supermercado transnacional.

Fue cuando conoció a quien le brindaría su amistad por varios meses, primero como instructora, ya que ella la elegida para capacitarlo para realizar su función labor en el área de cajas.

Así fue como todos los días platicaban, se contaban cosas personales y abordaban temas como el estado civil, sus orígenes, lugar de residencia, recuerdos de infancia, entre la plática él le expuso que no tenía dónde quedarse ni el dinero para rentar.

A inicios de enero de este año, compadecida por la situación de Jassiel “N.” y después de ver que era responsable y trabajador y no sospechar de algún tipo de malas intenciones por su apariencia o forma de actuar, le ofreció espacio en su casa para vivir mientras conseguía rentar otro lugar.

Durante el periodo en que compartieron la vivienda, el sujeto cambió de trabajo a otro supermercado y, pasados los meses, le reveló que sentía atracción por ella, pero ella le dijo que no podía ser, debido a la diferencia de edades.

A pesar de conocer su decisión, el 6 de abril por la noche, de las palabras pasó a la agresión física y la atacó para violarla, además la encerró en su propia vivienda por varios días y continuó con los ataques sexuales y golpes.

Durante tres días continuó, el hoy sentenciado, agrediéndola sexualmente, siempre imponiendo la condición física, evitando dejarla sola, impidiéndole que se comunicara por cualquier medio, hasta que las hermanas de la víctima fueron a buscarla, pues no sabían qué pasaba.

El propio Jassiel “N.” abrió la puerta y le dijo que ella ya no vivía ahí, a la fuerza entraron y la encontraron en estado de shock encerrada en el baño, sin hablar, con algunas huellas de violencia física.

De ahí se fueron a las instalaciones de Seguridad Pública Municipal, donde la contactaron con personal de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJE), a través del Agente del Ministerio Público.

Al principio no expuso la violación, sólo los golpes y la privación ilegal de la libertad, pero después reveló todo, por lo que recibió atención inmediata por psicólogos del Centro de Atención a Víctimas del Delito (CAVID).

Se abrió la carpeta de investigación, obteniendo el Ministerio Público del Juez la orden de aprehensión, la cual cumplieron elementos de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC) el 28 de agosto pasado.

Ya ante el Juez, en la audiencia dentro de la causa penal 182/2019, Jassiel “N.” quedó vinculado a proceso y aceptó el procedimiento abreviado por violación agravada en número de tres y privación ilegal de la libertad agravada.

Gracias a la integración de las investigaciones de la FGJE, el Juez dictó 30 años de prisión por la violación y cinco años más por la privación ilegal de la libertad.

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