Tragedia aérea en Washington: Aviones colisionan sobre el Potomac
El caos se desató la noche del miércoles 29 de enero cuando un Bombardier CRJ-701, operado por PSA Airlines para American Airlines, colisionó con un helicóptero UH-60 Blackhawk del Ejército de EE. UU. mientras realizaba su aproximación final al Aeropuerto Internacional Ronald Reagan. La tragedia ocurrió a sólo cinco kilómetros de la Casa Blanca y el Capitolio.
El impacto partó en tres secciones al avión, que cayó en aguas poco profundas del Potomac, mientras que el helicóptero terminó volcado en el río. Según grabaciones obtenidas por BBC, un controlador aéreo intentó comunicarse con la tripulación del helicóptero segundos antes del impacto sin recibir respuesta.
Desde el momento del accidente, un operativo masivo de rescate se desplegó en la zona. Más de 300 elementos de emergencia, botes inflables y helicópteros han trabajado en la búsqueda de víctimas. Hasta el último reporte, se han recuperado 30 cuerpos, 27 de ellos pertenecientes a los pasajeros del avión y tres a la tripulación del helicóptero militar.
Entre las víctimas se encuentran miembros del Skating Club of Boston, incluyendo a los reconocidos entrenadores de patinaje ruso-estadounidenses Evgenia Shishkova y Vadim Naumov. Sus alumnos, Jinna Han y Spencer Lane, también iban a bordo. En el helicóptero, viajaban tres soldados en misión de entrenamiento nocturno, cuyos nombres no han sido revelados.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó sus condolencias y al mismo tiempo criticó la gestión del control aéreo durante administraciones anteriores. El secretario de Transporte, Sean Duffy, aseguró que la investigación llegará hasta las últimas consecuencias para esclarecer lo sucedido y evitar futuras tragedias.
Expertos en seguridad han alertado sobre el aumento de incidentes aéreos en Estados Unidos, especialmente por la escasez de personal en torres de control. La Administración Federal de Aviación (FAA) y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) ya investigan las causas del accidente, incluyendo la respuesta del helicóptero a las advertencias del controlador aéreo y posibles fallas en los protocolos de separación de vuelos.
El Aeropuerto Internacional Ronald Reagan suspendió todas sus operaciones tras el accidente, aunque se espera que reanude vuelos a partir del jueves en la mañana. Este siniestro aéreo se suma a una lista de incidentes que han generado preocupación en el sector aeronáutico y refuerza el debate sobre la necesidad de mejorar las condiciones del tráfico aéreo en el país.