En la noche del domingo, dos hombres armados con pistolas irrumpieron en una tienda de autoservicio donde sometieron al guardia y al subgerente para posteriormente saquear la caja fuerte.

Los hampones se llevaron como botín el monto económico de las ventas del fin de semana, cuya cifra no fue estipulada.

El delito se cometió en perjuicio de una tienda de la cadena comercial Bodega Aurrerá, con domicilio en bulevar Juan Bautista de Escalante, en el fraccionamiento El Encanto, al norte de Hermosillo.

Fue a las 1:36 horas de ayer cuando se informó al 911 que en lugar se había registrado un robo con violencia y agentes de diversas corporaciones policiacas atendieron el reporte.

Los policías se entrevistaron con Jorge, de 23 años, quien se identificó como guardia de seguridad interno de la empresa.

El hombre manifestó que alrededor de las 23:20 horas del domingo, después que el establecimiento comercial se cerró al público, realizaba un recorrido por área de electrónica.

En ese sector, prosiguió, fue sorprendido por dos personas del sexo masculino con el rostro cubierto, quienes lo amenazaron con armas de fuego; el subgerente también fue sometido.

Los hampones obligaron a los trabajadores a que los condujeran hasta el sitio donde se concentran los valores económicos de la tienda.

Posteriormente hicieron un boquete en la pared para poder ingresar al cuarto donde se ubica la caja fuerte.

Luego hicieron uso de un esmeril para hacer un hoyo en uno de los lados del dispositivo de resguardo de dinero, acción que duró algunos minutos.

Finalmente pudieron tener acceso a las bolsas que contenían el efectivo recaudado durante los días viernes, sábado y domingo.

Con todo el dinero de las ventas, los sujetos salieron el inmueble por la puerta de seguridad y llegaron hasta un vehículo que estaba estacionado afuera del comercio.

De acuerdo a versión de los afectados, la unidad motriz en que huyeron es tipo sedán, de color oscuro.

Tras escuchar el relato, los agentes realizaron el informe policial homologado y canalizaron al encargado de la tienda a una Agencia del Ministerio Público del Fuero Común para que interponga denuncia, mientras que el establecimiento estuvo cerrado al público ya que personal de Servicios Periciales realizó el levantamiento de huellas y demás pruebas que lleven al esclarecimiento del atraco.

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