
¡Obregón se lució! Grito con lleno, banda y antojitos
La noche olió a pólvora, a elote y a fiesta. Miles de familias se lanzaron al Centro para vivir el Grito con todo: música en vivo, juegos mecánicos y antojitos mexicanos a cada paso. Desde temprano se sentía el “modo selfie”: sombreros, listones tricolor y outfits que pedían foto para las historias.
A las 23:00 horas, el balcón del Palacio Municipal se encendió. Javier Lamarque ondeó el Lábaro Patrio y soltó el “¡Viva México!” entre campanadas y confeti, con un coro de más de 20 mil gargantas que retumbó en la plaza. ¿Te tocó estar al frente… o lo viste desde la zona de foodtrucks?
Como parte del protocolo, la Secretaría del Ayuntamiento, Lucy Haydee Navarro Gallegos, dio lectura al Acta de Independencia, la misma que leyó Andrés Quintana Roo en 1813. Después, la escolta de Seguridad Pública entregó la Bandera al 60 Batallón de Infantería, y de ahí al Presidente Municipal, para el momento cumbre desde el balcón.
El grito se adornó con vivas a Hidalgo, Morelos, Guerrero, Allende, Josefa Ortiz, Guadalupe Victoria, Gertrudis Bocanegra e Ignacia Rodríguez, y, claro, el triple ¡Viva México! que hizo brincar hasta al más serio. ¿Cuál fue el “viva” que gritaste más fuerte? ¿Te viste en alguna transmisión en vivo?

Mientras tanto, el ambiente abajo siguió prendido: bandas, norteño y cumbias para que nadie se quedara sentado. Los puestos sacaron lo mejor de la noche: chorreadas, banderillas, nieves y aguas de todos los sabores. Si fuiste en familia, ¿qué fue lo primero que compraste: churros, elotes o una bandera luminosa?
En el balcón acompañaron al Alcalde su esposa Patricia Patiño Fierro, autoridades militares y policiacas, regidoras, regidores y funcionariado municipal. Arriba, protocolo. Abajo, la banda cajemense armando su propio festival patrio con niños en caballitos mecánicos y tías entregadas al “Payaso de Rodeo”.
El cierre tuvo el sello que nos encanta: luces, música y ese murmullo de “¿mañana a qué hora nos vemos?” que deja claro que el festejo se extiende a brunch familiar. Para quienes no alcanzaron lugar frente al Palacio, la fiesta también se vivió desde las orillas… y sí, también cuenta si tu mejor toma salió desde el hombro del compa.
Aunque el grito se replica en todo el país, esta crónica es desde y para Ciudad Obregón: lo que se vivió anoche es parte de nuestra memoria cajemense. ¿Qué fue lo más chilo: el momento del balcón, la música o los antojitos? Te leemos en los comentarios. En OBRNoticias.com, Las noticias que vale la pena conocer.