Luis Mendoza y Gilberto Ruiz en el Salón de la Fama de los Yaquis
En una noche histórica para el beisbol cajemense, el Estadio Yaquis fue el escenario de una emotiva ceremonia donde Luis Alonso Mendoza y Gilberto Ruiz Razo fueron inmortalizados en el Salón de la Fama del club. Acompañados por familiares, amigos y una apasionada afición, ambos personajes dejaron claro por qué su legado es parte esencial de la historia de los Yaquis de Ciudad Obregón.
Luis Alonso Mendoza, nacido en Veracruz pero de corazón cajemense, fue pieza clave en el tricampeonato de la Tribu. Su número 46, ahora retirado, representa los momentos más gloriosos del equipo en la Liga Mexicana del Pacífico. “Aquí logré una gran química con mis compañeros, y la afición fue mi mayor motor en esta bonita etapa”, expresó el lanzador, emocionado tras recibir el reconocimiento.
En la misma ceremonia, el cronista deportivo Gilberto Ruiz Razo también fue exaltado al Salón de la Fama. Con 50 años de trayectoria en el periodismo deportivo, su columna Séptima Entrada ha sido una referencia para los amantes del beisbol mexicano desde los años 80. “Es un honor inmenso recibir este reconocimiento en la tierra donde el beisbol se vive con tanta pasión”, dijo Ruiz Razo entre aplausos y ovaciones.
El evento fue una mezcla de nostalgia y orgullo, con momentos que arrancaron lágrimas a los presentes. Luis Alonso Mendoza estuvo acompañado por su familia y amigos, incluido Agustín Murillo, exjugador de los Yaquis y su compadre, quien destacó el liderazgo y el talento del lanzador.
El reconocimiento no solo celebra el pasado, sino que inspira a nuevas generaciones de beisbolistas y periodistas que ven en estas figuras un ejemplo de dedicación y amor por el deporte.
El Salón de la Fama del club sigue siendo un símbolo de excelencia, y en esta ocasión, la ceremonia reafirmó el espíritu beisbolero que une a Cajeme. Un recordatorio de que el talento, la perseverancia y la pasión siempre encontrarán un lugar especial en el corazón de los cajemenses.