La jornada del 1 de diciembre tomó un rumbo inesperado en la Corte Federal de Chicago cuando Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, se declaró culpable de cargos relacionados con narcotráfico. Su admisión forma parte de un acuerdo judicial con el que busca evitar la cadena perpetua y acceder a beneficios legales limitados.

La declaración sorprendió a la propia corte al revelar un episodio que durante años permaneció en absoluta reserva: la participación directa de “El Güero” en el secuestro de Ismael “El Mayo” Zambada, uno de los narcotraficantes más buscados de las últimas décadas y cofundador del Cártel de Sinaloa.

Durante la audiencia, Guzmán López narró con detalle cómo engañó a Zambada para citarlo en una finca de Sinaloa. En un cuarto privado, y sin que la víctima sospechara algo, un grupo de hombres irrumpió por una ventana, lo esposó, le cubrió la cabeza con una bolsa y le apuntó con armas de fuego para luego trasladarlo contra su voluntad a territorio estadounidense.

“El Güero” aseguró que su intención era recibir beneficios legales a cambio de entregar a una de las figuras criminales más buscadas por la DEA y el FBI, organismos que tienen expedientes abiertos en múltiples estados por narcotráfico y delitos conexos. Sin embargo, la Fiscalía dejó claro que esta acción no influirá para reducir su sentencia.

Las autoridades estadounidenses señalaron que, si bien el acuerdo firmado reconoce su participación dentro de actividades criminales en Chicago, la captura de “El Mayo” no será tomada como una colaboración que lo favorezca. Esto marca una línea firme dentro de los criterios aplicados en los llamados Juicios del Narco.

La comparecencia se llevó a cabo ante la jueza Sharon Johnson Coleman, encargada del caso en la Corte del Distrito Norte de Illinois. En ella, Guzmán López reconoció abiertamente su rol dentro del cártel dirigido por su padre, quien actualmente cumple cadena perpetua en una prisión de máxima seguridad en Florida.

Esta declaración de culpabilidad representa un momento clave dentro del proceso judicial que sigue Estados Unidos contra los integrantes de la estructura conocida como “Los Chapitos”. El testimonio de Guzmán López podría abrir nuevas rutas de investigación hacia redes criminales que hasta ahora habían permanecido fuera del alcance judicial.

Aunque este caso se desarrolla en escenarios internacionales, su relevancia alcanza a todo México, incluyendo regiones como Sonora, donde la ciudadanía permanece atenta al avance de investigaciones que buscan frenar las estructuras criminales. Para los habitantes de Ciudad Obregón, esta es una de “las noticias que vale la pena conocer” para entender mejor el panorama de seguridad que influye en el país.

Comentarios

comentarios