EE.UU. construirá nuevos “megacentros” para migrantes: 10 mil millones en prisiones bajo la Marina
El tema migratorio en Estados Unidos vuelve a encender el debate. Según un reporte de CNN, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) destinará 10 mil millones de dólares a la Marina para acelerar la construcción de megacentros de detención para migrantes en distintos puntos del país. Los primeros podrían abrir en tan solo unas semanas.
Los centros estarán ubicados en Luisiana, Georgia, Pensilvania, Indiana, Utah y Kansas, y cada uno podrá albergar hasta 10 mil personas. Serán, según el informe, estructuras temporales en forma de tiendas de campaña, aunque no se descarta que algunos se instalen dentro de bases navales ya existentes.
Esta decisión forma parte de un acuerdo entre el Departamento de Seguridad Nacional y el Departamento de Defensa, que busca usar al Comando de Sistemas de Suministro Naval (NAVSUP) como intermediario para acelerar los contratos con empresas encargadas de la construcción y el mantenimiento de los centros. En pocas palabras, el gobierno quiere avanzar más rápido… sin tantos filtros burocráticos.
El anuncio no ha pasado desapercibido. Todd Schulte, presidente de la organización FWD.us, calificó la medida como “una expansión sin precedentes del sistema de detención en Estados Unidos”. Y no es para menos: el contrato representa un aumento del 250% sobre el presupuesto actual del ICE, la agencia que administra las prisiones migratorias.
Detrás de este megaproyecto está la “gran y hermosa ley” firmada por Donald Trump el pasado 4 de julio, que destina 45 mil millones de dólares a reforzar la infraestructura de detención migratoria. Con esta inversión, Estados Unidos podría llegar a detener diariamente a más de 116 mil personas, superando por mucho al sistema penitenciario federal.
De acuerdo con el Proyecto TRAC, la cifra de migrantes detenidos ha aumentado más del 50% desde el regreso de Trump al poder, alcanzando casi 60 mil personas en septiembre. Además, se han reactivado instalaciones militares como Fort Bliss, en Texas, que hoy funciona como centro temporal con capacidad para 5 mil personas.
El gobierno también ha recurrido a opciones fuera del territorio continental, incluyendo la base naval de Guantánamo y otros espacios en Yibutí, donde incluso se ha retenido a migrantes latinoamericanos. Estas acciones han sido duramente criticadas por organismos de derechos humanos, que advierten sobre posibles violaciones al debido proceso y condiciones precarias.
¿Se trata de una medida necesaria para controlar la migración o de una política que pone en riesgo la dignidad humana? ¿Hasta dónde puede llegar un gobierno en su afán por “proteger fronteras”?
Aunque este debate se desarrolla lejos de Sonora, el tema toca fibras sensibles también en Ciudad Obregón, donde muchas familias tienen seres queridos viviendo o intentando cruzar a Estados Unidos. En OBR Noticias creemos que informar con empatía también es una forma de acompañar.
Porque, como siempre decimos, estas son “las noticias que vale la pena conocer.”

